... y lo que ocurrió es que ese final feliz anunciado llegó un día vaporizando toda la sociología ficción de un solo golpe y tal vez para siempre. Y de ninguna manera el epílogo se prometía feliz. Lo supimos inmediatamente, aunque la excitación no nos dejara ser conscientes de ello... Tíos, ¿sabéis lo que esto significa? ¡De nuevo la Historia!
Más tarde, durante un reinventariado urgente de la mente, la bibliografía se volvió obsoleta de pronto -potencia de parada del acontecimiento- como nada en todo el presente continuo de nuestras vidas nos había hecho sospechar. Parecía que lo mejor sería ir olvidándonos de Jean: lo habíamos dejado muy atrás, a todos los efectos pronto se reuniría con Lipovetsky entre los benditos y los descatálogados de mejores tiempos.
Anagrama ¡Fabulosas fotos de portada!
-Ti amo Bianca.
-I love you Andy.
Y es verdad que fue una pena todo aquél patchwork desarbolado y barrido por un subgénero de pragmatismo que lo entretejió y, al fin y al cabo, sostuvo (en un sentido poco sostenible), durante tantos años. ¿Metarrelato? ¿de que habla este tipo? Aquí estamos hablando de una lucha a vida o muerte.
El discurso poliorcético de la seguridad que tantos beneficios había dado en materia de policías privadas y panoptismos se actualizó entonces en una ideología de base, una doctrina-crack (intenten leer algún documento USGov. sobre la materia y esto se convertiría en chiste si el asunto no fuera tan serio) para desarrollar la movilización en Guerra Mundial Permanente; y por cierto, que en "guerra" en su sentido más real. Después...
Después poco importó que la dotación del Apache configurara un cyborg de facto, una relación satélite-piloto-helicóptero-artillero, o que esa estructura compuesta percibiera a través de un sensorio maquínico la representación, de una representación, de una representación... porque, en realidad, un gatillo seguía siendo un gatillo...
Una menta sonora para aliviar el mal sabor de boca.
Más tarde, durante un reinventariado urgente de la mente, la bibliografía se volvió obsoleta de pronto -potencia de parada del acontecimiento- como nada en todo el presente continuo de nuestras vidas nos había hecho sospechar. Parecía que lo mejor sería ir olvidándonos de Jean: lo habíamos dejado muy atrás, a todos los efectos pronto se reuniría con Lipovetsky entre los benditos y los descatálogados de mejores tiempos.
Anagrama ¡Fabulosas fotos de portada!
-Ti amo Bianca.
-I love you Andy.
Y es verdad que fue una pena todo aquél patchwork desarbolado y barrido por un subgénero de pragmatismo que lo entretejió y, al fin y al cabo, sostuvo (en un sentido poco sostenible), durante tantos años. ¿Metarrelato? ¿de que habla este tipo? Aquí estamos hablando de una lucha a vida o muerte.
El discurso poliorcético de la seguridad que tantos beneficios había dado en materia de policías privadas y panoptismos se actualizó entonces en una ideología de base, una doctrina-crack (intenten leer algún documento USGov. sobre la materia y esto se convertiría en chiste si el asunto no fuera tan serio) para desarrollar la movilización en Guerra Mundial Permanente; y por cierto, que en "guerra" en su sentido más real. Después...
Después poco importó que la dotación del Apache configurara un cyborg de facto, una relación satélite-piloto-helicóptero-artillero, o que esa estructura compuesta percibiera a través de un sensorio maquínico la representación, de una representación, de una representación... porque, en realidad, un gatillo seguía siendo un gatillo...
Una menta sonora para aliviar el mal sabor de boca.
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